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Puerto de Pipinas, escala del anteproyecto

En este punto abordaremos la escala del anteproyecto, que amén de las justificaciones apuntadas a la necesidad de cargar de energías convectivas las 3000 Has de aguas interiores a 15 m de profundidad mediante las 5000 Has de gradual menor profundidad y otras 5000 Has de áreas húmedas apuntadas en las imágenes, propone 11 Kms de muelles.

La estimación de estas escalas como mínimas -lejos de estimarlas máximas-, surge del hecho que hoy descubre a la virtuosa hidrovía pareciendo estar empezando a mostrar sus límites.

Las interminables tareas de dragado siempre en aumento y ahora con 4 dragas que tampoco dan abasto, sospecho responden a un par de motivos. No me sorprendería que el sistema esté llegando a su límite “ecológico”, que por cierto suele estar muy alejado de los límites mecánicos con que se imaginan habilitados los que proyectan estos dragados afectando campos de energías y funciones de estos sistemas.

Mirar caudal y velocidad con todas las variables que quieran imaginar encuadradas en modelos newtonianos, no es mirar por ecosistemas termodinámicos y los gradientes de enlace de energías convectivas.

Ver 2ª parte de http://www.alestuariodelplata.com.ar/hidrovia.html

Que como tal, ninguna ventaja práctica regala este sarcófago dragado en función de sus modeladas virtudes mecánicas. No es con la información de una docena de boyas derivantes actuantes en superficie y vigiladas por un par de físicos en dinámica costera con créditos del CONICET que se accede a la información necesaria para mirar el problema de disociación térmica en las interfaces del tajo cada vez más profundizado. También el CONICET aprecia la luna de miel con Newton.

Los sistemas convectivos tienen su memoria grabada en los fondos que transita. Por ello es de estimar que hasta que no diseñen pequeñas boyitas “derivantes” con aptitud para seguir cerca del fondo a estas energías convectivas, toda la información que recogen las anteriores boyas no les den la pista del por quéaumentan las sedimentaciones en el profundizado canal.

Si el Paraná o cualquier otro curso de agua de planicies extremas pierde o ve disminuídas sus energías convectivas, sencillamente deposita sus cargas sedimentarias por el camino. Esas energías solares van transferidas de continuo por costas blandas y bordes lábiles a la sangría mayor merced a un perfil transversal adecuado.

Si el ojo mecánico cree que estas cuestiones se resuelven profundizando el tajo, estamos en problemas. Un tajo en el fondo no acredita acercar el gradiente para permitir que las aguas externas al tajo se asocien con estas más profundas de la sangría.

El sistema convectivo se interrumpe; se formaliza una capa límite térmica y esas aguas no solo pierden velocidad, sino que en consonancia pierden aptitud para transportar sedimentos, que por ende descargan en cualquier lado en donde esa capa límite térmica decide la suerte de bordar sus descargas.

Si el problema fuera el perfil transversal de las sangrías dragadas, pues entonces queda la alternativa de suavizar eseperfil para invitar al sistema convectivo a seguir alcanzando sus energías a las aguas en la profunda sangría.

Pero si estuviéramos llegando al límite de escala que aceptan estos cursos; que tanto responden a sus anchos y caudales, como a las calorías y sedimentos que de contínuo lo alimentan, sin ese ingreso y asociación de calorías seguimos en problemas. Recuerdo que la 2ª de la termodinámica peca de ingenua en este punto: sin adecuados y muy sutiles gradientes térmicos esa ley no se verifica.

De la misma forma, sin sedimentos nunca resolveremos elproblema, pues son ellos los que acopian las energías solares para seguir sosteniendo con esas reservas las energías de los corredores en los estuarios y en los mares

El mayor problema es que el ojo mecánico no advierte estos problemas. Ese ojo mecánico nunca intuyó esta clase de dificultades. La receta para resolverlos es: si hay problemas, pues entonces venga una nueva super draga. Con esa mirada tan simple, estos negocios de dragados siempre prosperan.

No quieran imaginar los cientos de super dragas a cargo del “mantenimiento” del Mississippi. Lujos que los americanos se dan, pero dudo estemos en condiciones de imitarlos. Mejor empiecen a pensar cómo sacar a los catecúmenos de Newton de sus cómodas simplificaciones mecánicas.

Los agujeros negros y la materia oscura que carga la mecánica de fluidos ignorando este 23% de la energía solar que alcanza la tierra dedicada al movimiento de los fluidos, son en la práctica bastante más domésticos que las incógnitas por las que indagan en el cosmos.

Me ha tocado en suerte mirar por este tipo de energías por algo más de una década sintiendo mi trabajo desarrollado, concentrado y animado en incomparable soledad.; alejado de todo catecismo; solo abriendo cada día un poco más mis ojos. Aunque siempre confieso, guiado por Alflora en sueños.

Ultimamente debo descansar algunas horas más de lo habitual porque mis neuronas no paran de alertarse con los problemas que veo sumarse por todos lados. Y son las miradas al destino mediterráneo de Buenos Aires las que con más recurrencia vuelven a visitar mis sueños.

Así las cosas, estimo que los barcos seguirán saliendo de Rosario con las bodegas desinfladas. Y si bien los granos viajarán por el Paraná, no así los minerales y mucho menos las pestes que por emisario oculto saca al estuario la refinería de Esso Campana, que es de suponer alguna vinculación asiste también a la de Petrobras.

Todas las petroquímicas tendrán que salir del Dock Sud y del Paraná para instalarse en este preciso punto del estuario donde fenomenales energías convectivas sacan todo tipo de pestes a miles de kilómetros del arranque. Lo mismo apreciarán los futuros puertos de las mineras.

Y más allá de la instalación de una boya para combustibles en la rada exterior a 50 o 60 Kms de Pipinas, hasta tanto no se resuelva como dragar a 45 pies el canal Martín García en el cruce con la placa originaria, la única forma de salir por el Guazú con bodegas llenas en embarcaciones algo más grandes que las acostumbradas, será por este puerto de Pipinas.

Por este motivo no advierto exagerada la propuesta de 11 Kms de muelles. Y vuelvo a repetir: la escala de las áreas profundas, mojadas y húmedas que le acompañan están en consonancia con la cantidad de calorías a acopiar para que la salida de este espejo interior reconozca apropiada carga de energías convectivas. Materia que jamás estuvo en los presupuestos y preocupación de nadie. Tal vez de a poco empiecen a sospechar el sentido de apreciarlas, aunque por momentos se abismen de haber estado tan cómodamente instalados en catecismos newtonianos.

Sin respaldo en energías convectivas los sedimentos precipitan. Sin gradientes térmicos del orden de las 0,2º sucede otro tanto en cada enlace entre ecosistemas. Y sin sedimentos las reservas solares no tienen dónde almacenarse.

Si los sedimentos se depositan en el Emilio Mitre, el problema no se resuelve con más dragados, sino entendiendo el meollo del problema: la ausencia de calor.

Ahora van a traer la super draga de corte. Muy bien. Vuelvan a cumplir con el contrato original y a pesar de que a Morelli no le gusta la idea de refular donde siempre lo hicieron, insistan con ello y saquen a relucir esa área peninsular sumergida, para que funcionando como estero y como ribera suavemente emergida, se llene de sol y obtenga de allí el alimento que carece Emilio Mitre.

Tan sencillo y tan complejo con ésto.

De todas maneras, no hagan como los americanos que todo lo resuelven con más super dragas. Miren con más atención cuál es el aporte que el sol hace a las dinámicas de las aguas. Algo que la condición picnal muy poco o nada habla. De hecho, las aguas bien cargadas de sedimentos son las que más rápido y más lejos viajan.

Empiecen algún día a hacer un listado de las contradicciones que cargan los sistemas newtonianos y encontrarán la forma de darse un paseo fuera del catecismo.

De todas maneras, vuelvo a repetir, los ecosistemas tienen límites. Y aunque no los conozcan, mejor es darse a sospecharlos. pues esos límites existen.

Si tienen un límite busquen aliviar al Mitre y busquen entradas por el Miní y por el Barca Grande. Que en el primero hay un abandono cuyas consecuencias en los desarrollos insulares de Oyarbide y vecindades nunca fueran alineadas con este desastre y los abandonos que hicieron de los dos sistemas de salida del Paraná de las Palmas. Esos abandonos hoy los están pagando en desvíos hacia el corredor oriental, que a su vez reconoce límites muy complicados.

El tapón de estos frentes deltarios se descubren también en las demoras en bajar las aguas en las áreas mesopotámicas inundadas. El descalabro excede por todos lados al pobre imaginario newtoniano.

Por ello confío, que la escala prevista en este anteproyecto del puerto de Pipinas invite, ayude y a unos cuantos obligue, a mirar con otros ojos los problemas del estuario de los que nadie habla

El puerto está previsto en 15 metros. El canal irá creciendo a medida que se vaya verificando su funcionamiento. Ambos, puerto y canal necesitan acoplarse a las fuentes de calor. El calor es lo que mueve las aguas y no la extrapolación metafísica de pendientes inexistentes.

El gran movimiento de suelos reclama áreas cercanas para depositar esas obranzas. Al final de las grandes imágenes que siguen encontrarán referencias de esas áreas estimadas en función de cotas de 10, 8 y 6 m., que en el siguiente /puertos8.html graficaremos multiplicadas.

Estimo que esta misma tarde estaré transfiriendo los archivos de este sitio relacionados a este nuevo puerto, al nuevo sitio http://www.pppns.com.ar que por contar con un índice más discreto facilitará las búsquedas.

Agradezco a mis Queridas Musas Alflora Montiel Vivero y Estela Livingston los sueños, el ánimo, inspiración y pluma que me brindan

Francisco Javier de Amorrortu, 3 de Mayo del 2016

Sistemas convectivos

En termodinámica el calor es considerado como trabajo. Y una de las formas en que este trabajo en grandes escalas se organiza es en los procesos convectivos. Que ya están bien reconocidos en las convecciones atmosféricas haciendo viable el llamado ciclo hidrológico.

Pero aquí estamos hablando de convecciones en aguas someras y no tan someras que los mecanicistas vienen bautizando como “verticales turbulentas”, sin más trámites que nominarlas.

Esa característica de intercambio vertical en función de calentar en este experimento el líquido por debajo, fue descubierta por Henri Bénard en París en el año 1900.

Luego se observó que esas dinámicas verticales reconocen desplazamientos horizontales en función de un gradiente térmico de ligera menor temperatura. No mayor a 0,2º. De lo contrario quedan disociadas.

Estos sistemas reconocen memoria de sus tránsitos grabada en los fondos que transitan Y en ciertas épocas del año en que las diferencias de temperatura entre la superficie y el fondo disminuyen, la latitud del sistema vertical les permite mostrar en superficie todos los nutrientes depositados en el fondo que estos sistemas tienen gran capacidad para transportar.

Esas manifestaciones se llaman bloomings o floraciones. La NASA da cuenta una y otra vez de ella. Pero nunca ha apuntado a sus tránsitos horizontales.

En planicies extremas todas las modelaciones están fundadas en criterios gravitacionales, flujos laminares y modelos de caja negra. Con esos recursos tienes herramientas para fabular lo que se te ocurra. Pero de ahí a modelizarlas en laboratorio hay un abismo a transitar.

En planicies extremas con pendientes menores a 1 cm/Km no hay energía gravitacional, ni flujos laminares que valgan. Todo es convectivo. Sin embargo, las elecciones que hace la razón humana infiriendo la validez de los modelos más simples ha sido siempre el camino seguido por la mecánica de fluidos.

La imagen satelital ha abierto las puertas a estos reconocimientos. Que no entran por la razón, sino por los ojos. Luego de hacer acopio de abundante información comienzas a conceptualizar oportunas fenomenologías.

En Madre Natura las energías del sol se intercambian entre ecosistemas vecinos, en tan alto grado cuando se organiza el proceso convectivo, que hasta el mismo concepto de entropía queda alterado para volver a recuperar su sentido primigenio, que siempre señaló la conservación de la energía a pesar de haber reconocido sucesivas transformaciones.

Esto no se manifiesta en sistemas de cajas adiabáticas cerradas, sino en sistemas termodinámicos naturales abiertos en los que el sol es fuente originaria del movimiento perpetuo. La 2ª ley de la termodinámica falla por no haber advertido la importancia de los gradientes térmicos que sostienen los enlaces de estos sistemas, de muy buena memoria y de gran escala.

Francisco Javier de Amorrortu

 

Superposición de imágenes mostrando el plano de cota de los 10 m, indicador de áreas para depositar movimientos de suelos

cota 8 m

cota 6 m